Normativa europea sobre plásticos: impacto ambiental y reducción del consumo

11 Mar, 2020

Por la reducción de los envases de plástico

La emergencia climática está obligando a empresas y administraciones a tomar medidas para frenar su impacto en el medio ambiente y en la sociedad en general. Una de las medidas más destacables en este sentido es la Directiva (UE) 2019/904, aprobada por el Parlamento Europeo y el Consejo el 5 de junio de 2019, una normativa destinada a reducir la fabricación y el consumo de los envases de plástico, así como a mejorar la gestión de los residuos de envases de un solo uso. 

¿Por qué una normativa europea sobre plásticos? 

Una de las medidas estrella es la de legislar para reducir el consumo de plásticos de un solo uso. La razón es que estos plásticos tienen un periodo de degradación extremadamente largo: algunos de ellos pueden tardar cientos de años en degradarse en cualquier medio natural. Esto genera la acumulación de plásticos en entornos naturales, especialmente mares y océanos, donde tienen un efecto profundamente perjudicial para la fauna, la flora y, por extensión, la vida humana.

El carácter nocivo de esta contaminación se agrava especialmente con el problema derivado de los microplásticos, trozos de plástico de menos de 5 mm de longitud. Estos microplásticos son el resultado de la degradación lenta y progresiva de los plásticos, que terminan en la cadena trófica, en la que los nutrientes se transfieren ulteriormente de animales a humanos. Los efectos que la ingesta de estos microplásticos tienen en la salud de cualquier ser vivo todavía no están completamente claros, pero, como medida de prevención de los posibles efectos nocivos que puedan tener, se recomienda evitarlos en la medida de lo posible. 

Ante este y otros problemas derivados de la contaminación de complejos ecosistemas, la Unión Europea ha determinado la necesidad de reducir la fabricación y consumo de plásticos, especialmente los de un solo uso. Para ello, se ha aprobado una nueva normativa europea sobre plásticos que aspira a solucionar, parcial y progresivamente , este grave problema para la vida.

¿A qué productos plásticos aplica? 

El ámbito de aplicación de la normativa europea sobre plásticos es muy amplia. Afecta, como se describe en el artículo 2, a «los productos de plástico de un solo uso que se enumeran en el anexo, a los productos fabricados con plástico oxodegradable y a las artes de pesca que contienen plástico». El mencionado anexo se compone de siete grupos diferenciados, y para cada uno de ellos se aplican normas concretas. 

El énfasis de la normativa sobre los plásticos de un solo uso 

La normativa europea insiste, como ya se ha mencionado, en los plásticos de un solo uso, que define así: «fabricado total o parcialmente con plástico y que no ha sido concebido, diseñado o introducido en el mercado para completar, dentro de su periodo de vida, múltiples circuitos o rotaciones mediante su devolución a un productor para ser rellenado o reutilizado con el mismo fin para el que fue concebido». 

Por ser los más nocivos para el medio ambiente, los plásticos de un solo uso deberán ser reducidos progresivamente desde ahora hasta 2026, año en el que se deberán haber implantado todas las medidas necesarias para su reducción. 

La importancia de ser una empresa sostenible: packaging sostenible 

Más allá de la normativa europea sobre plásticos, resulta evidente la necesidad de que las empresas actuales adopten las medidas adecuadas para reducir su consumo de plásticos de un solo uso en la comercialización de sus productos. 

Por un lado, la legislación cada vez más restrictiva en este ámbito hará que finalmente el uso de plásticos no sea tan rentable como ha sido hasta hoy. Por otro, no se puede perder de vista la imagen comercial que la propia empresa proyecta a los consumidores y clientes potenciales. 

La conciencia ecológica y el consumo responsable son elementos que ya están presentes en las decisiones de compra de miles de consumidores, y todo apunta a que esta tendencia se incrementará en los próximos años. Así, es fundamental que las propias empresas se adelanten a estas demandas y opten por invertir en packaging sostenible. Las opciones son varias; mediante la reducción de envoltorios innecesarios o mediante la adopción del uso de otros materiales sostenibles y biodegradables, pero ante todo, deben promover el respeto por el medioambiente y, para ello, defender un consumo responsable.