En el camino de una producción responsable
¿Sabías que los Estados miembros de la Unión Europea tendrán que recuperar nueve de cada diez botellas de plástico en 2029? ¿Y que en 2025 el 25% del plástico de las botellas deberá ser reciclado, y en 2030 el 30%? La normativa europea sobre plásticos es una de las nuevas regulaciones que han elevado los requisitos de cumplimiento en materia de responsabilidad medioambiental.
En base a lo dispuesto por la Directiva (UE) 2019/904 del Parlamento y el Consejo Europeo el 5 de junio de 2019, las empresas que empleen en su producción materiales plásticos deberán introducir algunos cambios en su gestión para alinearse con el objetivo de reducir el impacto medioambiental.
En lo que respecta a las botellas de plástico, ya no basta con prestar atención al marcaje. Para estar al día en materia de cumplimiento, será necesario buscar alternativas al poliestireno expandido. Habrá que encontrar nuevos materiales, sustitutos del plástico oxodegradable.
Para alcanzar los propósitos de la normativa europea sobre plásticos, los fabricantes tendrán que asumir una mayor responsabilidad ecosocial, promover el consumo responsable y mejorar su compromiso en la gestión de residuos, comenzando por incluir nuevos objetivos de reducción, reutilización y, en última instancia, de reciclaje de plásticos.
Nueva normativa europea sobre plásticos: del cumplimiento al compromiso ecosocial
El principio que rige la normativa europea sobre plásticos es que “quien contamina paga”, y el plástico es uno de los materiales más contaminantes del planeta. En la práctica, esta nueva regulación afectará a la gestión de las empresas que trabajan con productos fabricados a partir de plástico.
Los aspectos principales que deben tener en cuenta estas empresas son los siguientes:
- Necesidad de incluir cambios en el diseño de algún producto y sus potenciales consecuencias para la imagen del mismo. Algunos de los nuevos requisitos aplicables a los productos, como el de asegurar que las tapas y tapones permanezcan unidos al recipiente,, podría requerir un nuevo diseño del envase. Estos cambios, en la mayoría de los casos, podrían tener consecuencias en las tendencias generales del sector. En este caso, la solución pasa por poner el foco en la sostenibilidad y, por ejemplo, no solo introducir modificaciones en el diseño y los materiales, sino aprovechar para poner en marcha otras iniciativas ecológicas de manera simultánea.
- Necesidad de tomar decisiones estratégicas más conscientes con la sostenibilidad medioambiental. En esta línea, puede ser interesante valorar el uso que se dará a los productos una vez concluya su utilización prevista, escoger abastecedores locales o buscar materiales alternativos que sean biodegradables.
En cuanto a la gestión de residuos, una de las primeras buenas opciones de los fabricantes es la de ayudar a los consumidores con una acertada elección de marcaje. Si se incluye en un lugar visible el símbolo adecuado (etiquetado con una tecnología de marcaje que garantice que será legible) se indicará al comprador las medidas de eliminación de residuos de cada producto una vez termine su vida útil.
La importancia de la gestión de residuos y la reducción del plástico
Hay muchas marcas que ya se han puesto manos a la obra. Su visión les ha permitido aprovechar el momento de cambio para transformar los desafíos en oportunidades, los requisitos legislativos en señas de identidad. Algunos casos son los de P&G, que ha aumentado el porcentaje de material reciclado en sus envases, Unilever, que ha establecido sistemas de depósito y devolución y Coca Cola, que ha rediseñado su packaging para impulsar la reutilización.
Sus aciertos son fuente de inspiración para ver la normativa europea de plásticos como una puerta abierta a la evolución comercial. ¿Ves claros los beneficios de una gestión más verde para la reputación de tu marca? ¿Crees que merece la pena diferenciarse de la competencia haciendo una gestión de tu negocio más ecológica?
Hoy día, los consumidores se decantan por las marcas que ya están actuando, poniendo en marcha iniciativas específicas y que demuestran una necesaria preocupación por el deterioro del planeta. Tomar conciencia de ello te permitirá buscar la mejor manera de adaptar tu estrategia a un modelo de gestión más consciente que se convertirá en tu fuente de ventaja competitiva con respecto a otras empresas del sector.
Conviértete en una de las primeras empresas en alinearse con los objetivos mundiales para la reducción del plástico.
